Cómo hacer sesiones de brainstorming exitosas

Una de las metodologías por excelencia para dar con soluciones creativas e innovadoras es el brainstorming o lluvia de ideas. Esta técnica se basa en la interacción de los miembros del equipo, con el objetivo de crear nuevas ideas para solucionar un problema concreto.

La finalidad es generar una gran cantidad de ideas para después aceptarlas o rechazarlas y seguir trabajando sobre las que se han elegido. La clave está en entender que no hay ideas buenas o malas, y que es un ejercicio de creatividad para encontrar soluciones alternativas a las que podríamos pensar en un principio.

Tipos de brainstorming o lluvia de ideas

Existen diferentes tipologías de brainstorming, y dependiendo del reto al que nos estemos enfrentando y a las características de nuestro equipo, podemos utilizar una u otra. Estas son algunas las tipologías más comunes que puedes poner en práctica:

• Brainstorming directo. Es el brainstorming clásico y permite desarrollar la parte creativa del equipo. 
• Brainstorming inverso. En este caso se plantean ideas contrarias a lo que realmente queremos, y después lo negativo se convierte en lo positivo.
• Mapa mental. La metodología es igual que en el brainstorming clásico, pero después se crea un mapa mental para visualizar las relaciones entre las ideas.
• Role Storming. Consiste en resolver una determinada situación o problema desde el punto de vista de otra persona, con el objetivo de generar nuevas ideas desde tu nuevo yo.

5 pasos para que las sesiones de brainstorming sean un éxito

Para sacar el máximo partido a nuestras sesiones de brainstorming, el primer paso viene antes de la propia sesión, y consiste en planificar cómo se va a llevar a cabo. Estos son los pasos que tenemos que seguir:

1. Preparar y planificar la sesión con anticipación
2. Crear un entorno agradable y gestionar las expectativas de los participantes
3. Generar ideas
4. Compartir los resultados
5. Hacer un seguimiento

El primer paso es asegurarnos de que el equipo que va a formar parte de la sesión de brainstorming sabe el motivo por el que se va a llevar a cabo. Además, debemos planificar cómo vamos a realizar la sesión para tenerlo todo preparado. Tenemos que asegurarnos de establecer el contexto y proporcionar los materiales necesarios para que los participantes se puedan preparar para la sesión. 

Uno de los factores claves para que la sesión de brainstorming vaya bien es que los participantes estén entusiasmados de participar. Es muy recomendable empezar con alguna actividad para romper el hielo y crear un ambiente más agradable en el grupo. Para esto podemos realizar una serie de ejercicios para dinamizar la sesión online y conseguir crear un ambiente relajado que propicie la participación y la comunicación. 

En esta primera fase también es muy importante crear una serie de reglas para que todo el mundo sepa cómo tiene que actuar, así como aclarar cuáles son los objetivos y las expectativas de la sesión.

Una vez que todo el mundo tiene claro por qué y cómo vamos a hacer la sesión de brainstorming, es el momento de generar las ideas. Para esto podemos utilizar herramientas como Mural o Figma, que nos permiten trabajar de forma colaborativa.

Para favorecer la participación, podemos utilizar un sistema de pequeñas recompensas para motivar al equipo y conseguir que la sesión sea más participativa.

Una vez que hemos terminado la fase en la que se proponen todas las ideas tenemos que profundizar en ellas para elegir con cuáles podemos seguir adelante. No tenemos que tomar al pie de la letra todas las ideas que se han propuesto, pero nos pueden ayudar a dar con la solución que necesitamos.

Tras terminar la sesión, debemos crear un documento en el que recoger todas las ideas que se han propuesto y cuáles se han empezado a desarrollar para que todo el equipo esté alineado con las mismas ideas. También podemos hacer una sesión de seguimiento cuando el proyecto está más avanzado, para que todos los participantes puedan ver que la idea o las ideas elegidas realmente se han llevado a cabo.

Las sesiones de brainstorming son un magnífico recurso para tener ideas creativas e innovadoras, además de que favorece el trabajo en equipo. Tenemos que encargarnos de crear el ambiente adecuado para que sean un éxito.